Quería ver una serie no pegarme un tiro
Me ofrece Netflix una serie con Ricky Gervais y, como está él, no puedo decirle que no.
Ya se que no es nueva, pero yo Netflix lo pago para que lo usen mi vieja, mi hermana y mis hijos. Prácticamente no lo uso, no se qué hay o no hay. Perdoname, soy así.
La cuestión es que apenas le doy play se me empiezan a aparecer recortes muy golpebajeros que encontré en reels de Instagram. Todo muy emotivo, muy de llorar. Todo bien, pensé, son recortes.
Y no loco. No son recortes. Vas a pasarla mal. Te va a doler el pecho. Vas a querer ser Walter Olmos. Muchas veces por episodio.
¿Pero sabés qué? Apenas dejes de sentirte mal vas a tener un peso menos.
Porque no, After Life no es una serie sobre la muerte. Es una serie sobre el duelo. Y es muy diferente.
Hay muchas obras sobre la muerte. Todas más o menos esperanzadoras. Todas más o menos tristes. Pero no hay una que trate sobre la tristeza de quedarte cuando se muere alguien. No de esta manera
La cosa es más o menos así: Tony (Ricky Gervais) es un cincuentón que se queda viudo. Y es un tipo que toda su vida estuvo alrededor de su esposa y del amor que le tenía. Y de repente está solo.
Todos los días ve los videos que hacía con su mujer en su cotidianeidad y fragmentos de uno que ella le hizo antes de morir con una serie de consejos para que siga una vez que no estuviera. Los ve y escabia. Los ve y llora. Y sufre.
Acá hay que meter paréntesis para hablar del nivel de la interpretación de Gervais. Es demencial como consigue transmitir el dolor y la bondad inmensas que tiene su personaje. Hay escenas puntuales en donde tirás todo a la mierda porque es increíble pero hay una cosa en su actuación que es de un verosímil espectacular.
Vuelvo. Tony vive con la perra que le regaló a su mujer que es lo que lo mantiene atado a la vida (el tipo sufre tanto que se vuelve medio suicida y la perra representa a ya podés darte cuenta quién). En el camino conoce gente, entabla amistades nuevas, reordena su socialización. Lo que nunca hace es armar una pareja nueva.
Porque a diferencia de otras series sobre estos temas, en After Life el planteo es que el tipo no quiere otra relación. Y no la tiene. Nunca. La historia te va empujando a que sí, aunque va armar una nueva pareja, a que se lo merece, lo necesita. Pero no. No quiere.
Más arriba dije que es una serie sobre el duelo. Me corrijo. After Life es una serie sobre el amor. Sobre cómo es amar y, más que nada, sobre cómo, al final del día, es lo único importante que tenemos.
Sentime una Cosita B 
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